El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, cierra su paso por Davos con una defensa de la política exterior de España, de la que destaca que tiene peso, una identidad propia y es coherente. Características que han llevado a nuestro país a estar presente en los principales asuntos que configuran la agenda internacional y a que otros países reclamen la presencia de España en esos temas.
Con más de 60 de jefes de Estado y representantes de 120 países, Albares ha aprovechado este foro, que este año ha escogido el lema "colaboración para la era inteligente", para abordar los temas más acuciantes en diferentes paneles como el de "Diplomacy amid Disorder", donde participó con dos actores fundamentales en Oriente Medio: Qatar y Arabia Saudí.
Albares expuso las impresiones que traía de su reciente gira por Líbano y Siria, así como la visión del alto el fuego, tanto en Gaza como en Líbano. Y lo hizo en una intervención con la que reflejó que la voz de España es una voz con peso, con identidad propia y coherente.
En sus encuentros, Albares también puso de manifiesto que España es un país que, en estos momentos, goza del mayor peso internacional en la UE de nuestra historia. En este sentido, recordó que, sólo en los tres últimos años, hemos sido sede de la cumbre de la OTAN en el momento más delicado para la seguridad euroatlántica; hemos ejercido una Presidencia de la Unión Europea que ha servido para acercar más a América Latina y Europa; y hemos cerrado el Pacto de Migración y Asilo, entre otros hitos.
Nuevos hitos
Y avanzó que a estos seguirán otros en 2025, derivados de que Naciones Unidas haya confiado a España la Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo, que se celebrará en Sevilla en el próximo mes de julio; y de que todos los países de la comunidad iberoamericana hayan otorgado a España la secretaría pro tempore para la organización de la Cumbre Iberoamericana de 2026 en España.
Todo esto, junto con la presencia de españoles en puestos de gran relevancia en la Comisión Europea, en la OTAN o en la Autoridad Bancaria Europea, llevó al ministro español a concluir que la política exterior de España cuenta con una identidad propia que está presente y que otros países reclaman.
El ministro español ha mantenido diversos encuentros, entre los que destacan los que le han llevado a reunirse con sus homólogos de Chile, Jordania, Túnez, Arabia Saudí y el vicepresidente de Irán, entre otros, Además de un encuentro con el comisario para el Clima, Wopke Hoekstra. La agenda del ministro también ha contado con un apartado de diplomacia económica, que ha protagonizado con altos representantes de Google y el CEO de la Open Society Foundation.