La Paz, 6 de noviembre de 2025 (OPS)- En un esfuerzo por transformar el abordaje de la salud mental en el país, el Ministerio de Salud y Deportes del Estado Plurinacional de Bolivia con el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud OPS/OMS Bolivia, ha presentado oficialmente el Primer Plan Plurinacional de Salud Mental 2026-2030, una estrategia nacional que marca el inicio de una nueva era en la atención integral, comunitaria e intercultural de la salud mental.
Este plan responde a una deuda histórica con la población boliviana, que durante años ha enfrentado barreras significativas para acceder a servicios de salud mental adecuados. A partir de diagnósticos realizados, se identificaron brechas en cobertura, formación profesional, infraestructura y gobernanza, que ahora serán abordadas de manera estructurada y multisectorial.
Entre los resultados esperados del Plan destacan lograr la reducción de la brecha en la atención de salud mental, mediante la implementación de un modelo comunitario que prioriza la promoción, prevención, tratamiento, rehabilitación y recuperación en los tres niveles de atención, lo que permitirá ampliar el acceso a servicios oportunos y de calidad, especialmente en zonas rurales y periurbanas, mejorando la calidad de vida de la población y disminuyendo el sufrimiento psicosocial no atendido.
También se esperar el fortalecimiento del talento humano, a través de programas de formación continua y la incorporación de contenidos de salud mental comunitaria en la educación superior, lo que garantizará una red de atención más sólida, empática y capacitada, capaz de responder de manera efectiva a las diversas necesidades de la población boliviana.
El Plan establece el desarrollo de sistemas de información e investigación, orientados a generar datos confiables para la toma de decisiones y el monitoreo de políticas públicas, lo que permitirá una gestión más eficiente, transparente y basada en evidencia, adaptada a las realidades locales y poblacionales.
Con este plan, Bolivia espera promover la inclusión social de poblaciones históricamente vulneradas, como niñas, adolescentes, mujeres, pueblos indígenas, personas con discapacidad, comunidad LGTBIQ+, personas privadas de libertad y migrantes, promoviendo una sociedad más justa, equitativa y cohesionada, donde todas las personas puedan ejercer plenamente su derecho a la salud mental.
Este documento también establece la articulación con la política gubernamental Salud Familiar Comunitaria e Intercultural SAFCI, asegurando un enfoque integral, intercultural y participativo en todos los niveles del Sistema Nacional de Salud, lo que fortalecerá la soberanía sanitaria del país y fomentará modelos de atención que valoran la diversidad cultural y los saberes ancestrales, en diálogo con la medicina científica.
El Plan contempla cinco líneas estratégicas, entre ellas el liderazgo y gobernanza, la promoción y prevención, la formación del talento humano, la atención articulada en redes integradas de servicios de salud, y el fortalecimiento de los sistemas de información.
Este documento técnico-normativo no solo representa una herramienta de planificación, sino también un compromiso político y social para garantizar el derecho a la salud mental como parte del bienestar colectivo.