WHO - World Health Organization

09/17/2025 | News release | Distributed by Public on 09/18/2025 07:28

Mejora de la calidad de los medicamentos para la salud materna: ¿Qué pueden hacer los parlamentarios

Una parte importante de los medicamentos destinados a la atención de la salud materna son de calidad subestándar, incluidos los que se emplean para tratar la hemorragia posparto, la principal causa de mortalidad materna. En muchos países, especialmente en países de ingreso bajo y mediano, los proveedores de atención de salud no pueden confiar en la eficacia de los medicamentos de los que dependen.

En esta conversación, la senadora Oral Ataniyazova, de Uzbekistán y miembro del Comité sobre Salud de la Unión Interparlamentaria (UIP), y la profesora Tari Turner, Presidenta del Grupo Consultivo Científico y Técnico (STAG) del Programa Especial de las Naciones Unidas sobre Reproducción Humana (HRP), charlan sobre las medidas que los parlamentarios pueden adoptar para mejorar el acceso a medicamentos de calidad garantizada que pueden salvar la vida de mujeres embarazadas y sus lactantes recién nacidos.

Profesora Tari Turner (T.T.): Como investigadora profundamente interesada en la formulación de políticas para mujeres y niños basadas en la evidencia, considero que la calidad de los medicamentos es clave no solo para hacer efectivo el derecho a la salud, sino también para garantizar la confianza en los sistemas de salud. Sé que los responsables de la formulación de políticas también tienen se enfrentan a todo tipo de desafíos, así que siento curiosidad por saber por qué cree que, de todos los problemas de salud de envergadura en los que trabaja la Unión Interparlamentaria (UIP), es importante priorizar unos medicamentos de calidad garantizada para la salud materna

Senadora Oral Ataniyazova (O.A): Durante los últimos 20 años, la UIP ha mostrado el camino a los parlamentos para que se impliquen en cuestiones relacionadas con la salud. La Unión se centra en velar por que toda la población tenga un mejor acceso a los servicios de salud y en lograr que los resultados de salud sean más justos para toda la población.

Es profundamente injusto que mueran mujeres durante el parto por que no tienen acceso a medicamentos de calidad garantizada, seguros y eficaces, y esa es una cuestión que podemos solucionar. A menudo, las mujeres que más sufren son las más pobres, algo que resulta inaceptable.

Las tasas de mortalidad materna se están estancando en muchos lugares, y unas leyes y unas regulaciones más estrictas pueden dar la vuelta a la situación. Los parlamentos tienen el poder de romper esta dinámica: asegurar unos medicamentos de calidad garantizada no va solo de salvar vidas, sino también de impulsar los avances en salud, equidad y desarrollo.

La salud es una decisión política, y es fundamental contar con parlamentos y democracias fuertes. Estas instituciones ayudan a construir equidad, participación, rendición de cuentas y transparencia, en la esfera de la salud y en muchas otras.

T.T.: ¿Cómo ha influido su experiencia como médico en la manera como encara su papel de puente entre la ciencia y la política?

O.A.: En primer lugar, reconociendo que el embarazo y el parto no son enfermedades, sino procesos fisiológicos. Existen muchos factores interrelacionados que contribuyen a la salud, como la situación socioeconómica de la familia, la disponibilidad de servicios médicos de calidad, la conciencia pública acerca de las posibilidades de una maternidad sin riesgo, un análisis crítico de cada caso de mortalidad materna o de lactantes o un monitoreo periódico del conjunto del sistema para ofrecer servicios maternos e infantiles eficaces.

Todo esto descansa en los marcos legislativos y reguladores pertinentes de cada país y en el uso de los criterios de la OMS.

La experiencia científica, entendida como un proceso de investigación que busca establecer una base empírica, es el nexo de unión más importante. Sin análisis críticos y fiables, es imposible evaluar correctamente los riesgos, ni en el sistema de atención de salud, ni en ningún otro sector. Cualquier error a la hora de interpretar los datos conduce a conclusiones erróneas, decisiones erróneas y, en última instancia, a que se haga un uso inadecuado del presupuesto y se adopten programas ineficientes, lo que aumenta el riesgo para la salud pública.

Aprecio sumamente el papel del Comité sobre Salud de la UIP, ya que, entre otras cosas, brinda la posibilidad de promover estrategias parlamentarias para una maternidad sin riesgo a nivel mundial.

T.T.: Como sabe, existen enormes desafíos a la hora de velar por que los países y las regiones tengan a su alcance medicamentos de calidad garantizada; por ejemplo, los datos son limitados, hay poca conciencia, la reglamentación es incoherente y hay deficiencias en materia de infraestructura. Una nueva resolución aprobada en el 59.º periodo de sesiones del Consejo de Derechos Humanos insta a la acción multisectorial. En su opinión, ¿qué medidas de mayor impacto pueden adoptar los parlamentarios para abordar estos problemas?

O.A.: Los parlamentarios pueden cambiar la narrativa: que el acceso a medicamentos de calidad garantizada no sea únicamente una cuestión técnica, sino de equidad en la salud y una inversión inteligente en la población. Cuando la salud se ve como una inversión en lugar de como un costo, se convierte en un elemento central del desarrollo nacional.

Demostrar voluntad política significa respaldar esta visión mediante acciones tangibles, incluida una inversión coherente en sistemas de salud e infraestructura de reglamentación. Sin la debida financiación, persistirán las brechas en la calidad de los medicamentos y el acceso a estos.

Los parlamentos también desempeñan un papel clave a la hora de armonizar la legislación nacional con los estándares internacionales, velando por que los reguladores tengan la autoridad para actuar de manera decidida. Una legislación clara y coherente demuestra que la salud materna y unos medicamentos de calidad garantizada son una prioridad política.

T.T.: La acción multisectorial significa que todo el mundo tiene un papel que desempeñar. ¿De qué manera pueden científicos e investigadores como yo ayudar a parlamentarios como usted a lograr avances significativos en esta cuestión?

O.A.: Los científicos y los investigadores desempeñan un papel vital para ayudar a los parlamentarios a tomar decisiones informadas y efectivas, especialmente en asuntos complejos como el acceso a medicamentos de calidad garantizada. Uno de los principales obstáculos a los que nos enfrentamos es la falta de datos precisos y oportunos. La colaboración con expertos técnicos como usted es crucial, no solo para recopilar evidencia, sino para ayudar a convertir las conclusiones en conocimientos pertinentes para las políticas.

Al mismo tiempo, tenemos que fortalecer la alfabetización en el uso de datos entre los parlamentarios y nuestro personal a fin de fomentar en los parlamentos una cultura con más base empírica.

Y la evidencia por sí sola no basta: también debemos llegar a las personas que hay detrás de las cifras. Su investigación, junto con las historias de la vida cotidiana y las voces de la comunidad, pueden ayudar a humanizar el problema y hacer que cobremos conciencia de lo urgente que es actuar. Juntos, podemos cerrar la brecha entre los datos, las personas y las políticas.

T.T.: A través de la alianza de la UIP con la Organización Mundial de la Salud (OMS), lleva años colaborando con la OMS. Si mira hacia el futuro, dentro de cinco años, ¿cómo describiría el éxito? ¿Qué le permitiría afirmar que sus iniciativas parlamentarias han servido realmente para cambiar la situación de mujeres y familias?

O.A.: La alianza entre la UIP y la OMS ha sido fundamental para estrechar más los lazos entre las comunidades científica y parlamentaria. Esta colaboración es fundamental para mantener las actividades de promoción a escala mundial que llevan a cabo los parlamentos, asegurando que el liderazgo político y la evidencia científica vayan de la mano. También crea espacios valiosos para que los parlamentarios aprendan de las experiencias de los demás, comprendan qué funciona en distintos contextos y adapten enfoques de éxito a sus propios países.

En un momento en el que el foco global suele desplazarse hacia el conflicto y la seguridad (las respuestas a corto plazo a las crisis), progreso real sería que tenemos claras nuestras prioridades, de modo que las agendas nacionales giren alrededor de la salud y la vida de las mujeres y los niños.

Una manera de ver que hemos tenido impacto sería observar que se han introducido cambios en la legislación que fortalecen la regulación de los medicamentos, que han aumentado los presupuestos de salud que protegen la salud materna, que los gobiernos adquieren los medicamentos correctos en los volúmenes adecuados y que los parlamentarios colaboran entre sí, con independencia del partido al que pertenezcan, y debaten públicamente y exigen que se adopten medidas sobre estas cuestiones.

Destacado

Comité sobre Salud de la Unión Interparlamentaria (UIP) (en inglés)

Programa Especial de las Naciones Unidas sobre Reproducción Humana (en inglés)

Noticias

Trabajar juntos por un mundo más sano y más seguro: La OMS y la UIP renuevan su colaboración 25 de marzo de 2024

Notas descriptivas

Cobertura sanitaria universal (CSU) 5 de octubre de 2023
Servicios de salud de calidad 19 de mayo de 2025
Medicamentos esenciales 25 de septiembre de 2024

Enlaces conexos

Labor de la OMS en materia de salud materna (en inglés)

Labor de la OMS sobre salud sexual y reproductiva y derechos conexos (en inglés)

WHO - World Health Organization published this content on September 17, 2025, and is solely responsible for the information contained herein. Distributed via Public Technologies (PUBT), unedited and unaltered, on September 18, 2025 at 13:28 UTC. If you believe the information included in the content is inaccurate or outdated and requires editing or removal, please contact us at [email protected]