Nota Informativa 1321-25
La profunda devoción al Señor de los Milagros se convirtió en un factor de identidad espiritual y cultural para las comunidades peruanas en todo el mundo, particularmente en zonas tan alejadas del país como Nagoya, en Japón, y Canberra, en Australia. La festividad del Cristo Moreno, la mayor manifestación de fe en Perú, proyecta la rica cultura peruana.
Fervor en Nagoya
El domingo 6 de octubre, la Catedral de Nagoya fue el centro de la misa y procesión organizada por la hermandad de Komaki, que congregó a fieles y a hermandades de Midorigaoka, Anjo-Kariya y Hamamatsu. La participación masiva reflejó la solidez de la fe en la región.
Posteriormente, el domingo 19, la comunidad celebró el 25.º aniversario de la procesión del Cristo Moreno en la iglesia de Midorigaoka, Nagoya. El obispo de Nagoya, Michael Gorō Matsuura, presidió la misa en español y la procesión. La jornada incluyó números artísticos, una peña en homenaje al Señor de los Milagros, así como venta de comida y artesanía peruanas.
El cónsul general del Perú en Nagoya, Luis Espinoza, destacó la vinculación de la festividad con el Día del Peruano Migrante, que refuerza la identidad nacional en el exterior. Aseguró que el fervor por el Cristo Moreno representa una conexión de identidad espiritual y cultural para todas las comunidades peruanas en el extranjero.
La fe por el Cristo Moreno
En Oceanía, la Embajada del Perú en Australia celebró la devoción por el Cristo Moreno en la Iglesia St Peter Chanel's de Canberra el domingo 5 de octubre, junto a la comunidad peruana y latinoamericana. La misa fue celebrada por el nuncio apostólico, monseñor Charles Balvo. Tras la ceremonia, se realizó una procesión en la iglesia.
La celebración incluyó la exposición de la historia de esta devoción, una presentación de marinera norteña y la degustación de gastronomía peruana como el popular turrón de Doña Pepa y la mazamorra morada.
Posteriormente, las comunidades peruanas de Brighton Le Sands, Melbourne y Brisbane también celebraron con diversas actividades por el Señor de los Milagros, lo que refleja la cohesión de la comunidad migrante.